Entrevista a José Antonio Corchado, CEO de ASCIA
El equipo de ASCIA Renovables está volviendo al trabajo presencial, lo que pone de manifiesto la capacidad y rapidez con la que la compañía ha sabido adaptarse tanto al estado de alarma como a la desescalada.
Hoy entrevistamos a José Antonio Corchado, CEO de ASCIA Renovables, para conocer la situación actual en la compañía y cómo se ha vivido este nuevo contexto dentro de la misma.
¿Cuál es vuestra situación actual tras estos meses de crisis?
En ASCIA, nuestra principal prioridad ha sido cuidar de la salud del equipo y, tras un largo confinamiento, y un trabajo 100% desde casa durante más de tres meses, estamos retomando poco a poco la «nueva normalidad» en la oficina, acudiendo de momento dos días por semana. Así, hemos puesto en marcha un protocolo interno de higiene y seguridad, y provisto a cada empleado de un paquete preventivo (mascarillas, geles hidroalcohólicos, etc.). Gracias a la disposición independiente de cada puesto o módulo de trabajo, y la distancia amplia entre unos y otros, hemos podido volver con seguridad y comodidad.
¿Cómo se ha trabajado la comunicación en equipo dentro de la organización durante esta etapa de teletrabajo?
Especialmente ahora se está comprobando la importancia de la conectividad y la digitalización, y la fórmula del teletrabajo no ha dejado de ser un reto para todos aquellos acostumbrados al trabajo presencial. En este sentido, hemos apostado por las conferencias de seguimiento semanal, principalmente a través de Microsoft Teams, y por fomentar el uso de nuevas herramientas y aplicaciones colaborativas, para mantenernos alineados e informados acerca de las actuaciones por parte de cada miembro del equipo.
Lo cierto es que ha resultado sencillo y eficaz, al contar con un equipo muy comprometido que ha sabido adaptarse a las nuevas necesidades de forma rápida, por lo que esta modalidad de trabajo, que era nueva para todos, ha logrado ser un éxito.
¿Os ha ayudado esta experiencia para mejorar vuestros procesos internos?
Sin lugar a dudas, nos ha ayudado mucho para identificar nuevos procedimientos de trabajo y un modelo de gestión más eficiente. Hemos comenzado a implementar nuevas prácticas y dinámicas que, por simples que puedan parecer, han favorecido en gran medida la agilidad de trabajo y organización interna de la actividad y documentación, sobre todo.
¿Se han identificado nuevas oportunidades?
El obligado confinamiento nos ha ofrecido un periodo de reflexión intenso. Hemos identificado nuevas oportunidades y seguimos trabajando en la consolidación de una cartera de proyectos de calidad. Además, en este nuevo contexto económico, se ha destacado la importancia de nuestro campo de acción y mercado, donde especialmente en estas situaciones extremas, ha sido clave el mantenimiento de estructuras y suministro de energía a la población. Nuestro compromiso es contribuir a la mitigación del cambio climático y alinearnos, en este sentido, con las necesidades de nuestros socios e inversores para hacer frente a los retos de la transición energética y a la necesidad de un modelo de negocio sostenible.
Desde ASCIA estamos viendo una sociedad cada vez más consciente y responsable con su calidad de vida y entorno, lo que nos motiva para seguir trabajando en el desarrollo de nuestra actividad y la promoción de proyectos de energía renovable.
Con todo esto, lo que bien sabemos, es que las empresas han de moverse rápido y saber reaccionar a las oportunidades. Es muy importante el hecho de poder contar con buenos compañeros de viaje que caminen en la misma dirección que nosotros.
A nivel personal, ¿qué ha supuesto esta situación en la gestión corporativa de la compañía?, ¿cuál es el mayor aprendizaje que resaltarías tras esta experiencia?
La etapa difícil que hemos vivido, ha obligado a un esfuerzo y una iniciativa especiales de cada responsable en la empresa. La calidad y el compromiso de la inmensa mayoría han quedado demostrados.
Yo destacaría el aprendizaje de una relación entre nosotros más transversal y mucho menos jerárquica que, gracias a la implantación intensa de las tecnologías de comunicación, nos permitirán una agilidad de decisiones y dirección de trabajos clave para competir.
¿En qué posición quedan las renovables tras este periodo de crisis?
Esta crisis viene a acelerar la transición energética; las inversiones para reactivar la economía van a tener que dirigirse a sectores punteros, con creación de riqueza y empleo.
Las renovables quedan muy reforzadas, además, la necesidad de movilizar inversión privada nos está trayendo una cooperación reforzada entre sector público y los actores privados de la transición energética tan citada…